
por 7ma Medios
Franco Colapinto tuvo una de sus mejores actuaciones desde su desembarco en la Fórmula 1. El piloto argentino cumplió un papel destacado en el Gran Premio de Canadá, donde supo aprovechar una carrera caótica para lucirse. Con maniobras audaces y una gran lectura del ritmo, dejó en claro por qué Flavio Briatore lo eligió como pieza clave en el proyecto de Alpine.
Le tocó cargar con el peso del equipo tras un fin de semana olvidable de su compañero, Pierre Gasly, que largó desde el fondo por problemas en la clasificación. Colapinto, en cambio, partió desde la décima posición y, pese a no haber sumado puntos, fue el líder dentro del garaje francés. Su temple se notó en cada giro, incluso cuando la estrategia del equipo lo dejó sin opciones claras de avanzar.
“Fue una tarde difícil y no era lo que esperábamos”, reconoció el argentino tras finalizar 13°. A pesar de la frustración, rescató lo positivo: “Estoy contento con el progreso durante el fin de semana y quiero seguir así en Austria”.
En Alpine quedaron en deuda. Las decisiones desde el muro no acompañaron el rendimiento de Franco, quien tenía potencial para meterse en el top 10. La elección del momento para cambiar neumáticos y la lectura de carrera volvieron a fallar.
Gasly, por su parte, no tuvo reparos en admitir la dificultad del trazado canadiense: “Sabíamos que iba a ser complicado largando desde boxes. Probamos algo distinto en la estrategia, pero quedamos atrapados sin poder adelantar”.
A pesar de todo, en redes sociales se percibió la unión dentro del equipo. Franco escribió: “A seguir aprendiendo, ¡vamos por más!” y desde Alpine respondieron con un claro: “¡Vamos Fran! ¡Seguimos trabajando juntos!”
La próxima parada será Austria, donde Colapinto buscará confirmar su crecimiento y, con suerte, empezar a sumar los puntos que su talento ya merece.